Foto Manolo García

Fiesta de la Cruz Roja en el año 1960.

La Cruz Roja  cuenta con gran cantidad de voluntarios/as para prestar ayuda a la sociedad de forma desinteresada. Esta institución siempre tuvo el reconocimiento de la población por su carácter de obra social y un número importante de ciudadanos se enrolan en sus filas dispuestos a ser útiles en su cometido de ayuda y asistencia a necesitados. Era y sigue siendo un acto enaltecedor el formar parte de ese organismo por lo que siempre ha representado la Cruz Roja Española. El agradecimiento por parte de aquellos necesitados  que pudieron beneficiarse de este cometido es infinito y así se pretende hacerlo constar.         

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Las pruebas encontradas en la zona del Cerro de las Albahacas, evidencian que el ejército del General Cartaginés Asdrúbal Barca estuvo asentado en el citado lugar.

El profesor D. Arturo Ruíz  director del CAAI (Centro Andaluz de Arqueológía Ibérica) ha llevado a cabo un estudio que ha durado 8 años hasta poder constatar la veracidad de los acontecimientos, y dar constancia de la necesidad de abrir una página en la historia que toca directamente a Santo Tomé, evidenciando que la Batalla de Baécula tuvo lugar aquí. 

En Santo Tomé y sus alrededores no resulta dífícil encontar restos de gran valor arqueológico.Puntas de lanza, proyectiles de hondas, cerámicas, monedas, restos de piezas de plomo, pinzas quirúrgicas, adornos, botones,   engarces de collares ect, etc, han sido encontrados por personal especializado en el campo de la arqueología íbero-romana.

En este sentido es natural que Santo Tomé reivindique lo que le pertenece.   

La imagen data del año 2005, pero las investigaciones del hecho son anteriores.

La prensa se ha hecho eco desde el principio de este acontecimiento, y sólo ha evidenciado los pruebas y estudios para que el público en general sea conocedor de la realidad tal como es.

 LA LOCALIZACION DEL LUGAR DE LA BATALLA DE BAÉCULA

La comunidad ciéntifica que es la máxima autoridad para poder emitir juicio sobre el tema es la que en su momento investigó, analizó pruebas, y finalmente tras un largo y exhaustivo estudio, constató que la batalla de Baécula tuvo lugar en el  denominado Cerro de las Albahacas de Santo Tomé.

Durante este tiempo han habido divagaciones y elucubraciones para todos los gustos, todas ellas muy respetables,  convergente o divergentes por la autoridad que tienen las personas que las han emitido por ser especialistas en el asunto.  Lo que importa es la verdad, y es lo que se ha buscado afanosamente.Parece ser que finalmente el profesor  investigador D. Arturo Ruíz  del CAAI,   que ha capitaneado la expedidión, de un grupo de valores entendidos en este campo, de la Uniersidad de Jaén,  han conseguido reunir las pruebas suficientes, que demuestran que  efectivamente la batalla de Baécula, un hecho trascendental en la historia, tuvo como  escenario  el Cerro de las Albahacas, hasta  la finca denominada del Torruñuelo. Pruebas del asentamiento cartaginés y de actos bélicos -en este tiempo sobre el s.II a.C.- las hay,  que unidas a los estudios y  documentos escritos de historiadores romanos conducen en esta dirección de forma inexorable.

Este proceso ha durado casi una década y finalmente se ha reconocido el valor del trabajo hecho.

Así  es que se podría decir con permiso de todos,  sin ánimo de herir ninguna sensibilidad y siempre  con el respeto que merece todo aquel que piense diferente que "hay que  dar al César lo que es del César y al pueblo lo que es del pueblo".   

LA BATALLA DE BAÉCULA.  AÑO 208 a. C.

Texto de d. Antonio Ceacero Hernández

LA BATALLA DE DE BAÉCULA

PRESENCIA ROMANA

En el año 208 a.C. Aníbal - general cartaginés- al mando de su ejército se encontraba en la península Itálica ganando todos los enfrentamientos contra los romanos. Ceneo Escipión desembarcó en Ampurias  (Gerona) para tratar de evitar que llegasen a Aníbal refuerzos de guerreros y material.Dos añ.os después junto con tropas de su hermano Publio, se adentraron por la cabecera del Guadalquivir llegando hasta Cástulo (cerca de Linares), población importante por su control de la  cuenca minera de Sierra Morena, fundamental para la financiación de la guerra. Ambos sucumbieron en los enfrentamientos con los cartagineses. En al año 210 a.C. Publio Cornelio Escipión, hijo de Publio Escipión, desembarcó también en Ampurias y conquistó Carthago Nova (Cartagena), gran almacén de equipamiento militar y la principal base naval cataginesa en la península Ibérica. Nuevamente los romanos se internaron por el valle del alto Guadalquivir dirigiéndose hasta Cástulo, donde derrotaron a los cartagineses en la batalla de Baécula en el año 208 a.C. Tras la batalla  los pueblos indígenas se adherieron a los romanos para liberarse del pesado yugo cartaginés. En el 206 a.C. se entregaba sin resitencia Gades ( Cádiz), terminando así la presencia cartaginesa en la península Ibérica.

Aunque la entrada de los romanos en la península Ibérica tenía como único objetivo evitar el envío de refuerzos a Aníbal, terminada la contienda no se marcharon, ya que Hispania era rica en minas de plata, agricultura y guerreros para surtir su ejército de mercenarios. Su dominio perduró hasta las primeras invasiones bárbaras, allá por el año 409 d.C., es decir más de 600 años.

DESARROLLO DE LA BATALLA 

Las fuentes escritas que nos relatan el desarrollo de la batalla se deben a Tito Livio y al escritor Polibio.

Tras la conquista de Cartago Nova (Cartagena), la ciudad más importante fundada por los cartagineses en la península Ibérica, base naval y almacén, Publio Cornelio Escipión puso rumbo hacia el sur en la primavera del año 208 a.C. con el objetivo de apoderarse de la cuenca minera de Sierra Morena, controlada por Cástulo, principal fuente de financiación de los cartagineses para pagar las tropas mercenarias, con el ejército de Asdrúbal Barca (hermano de Aníbal) en las cercanías. Su temor era que se uniesen los otros dos ejércitos  y le acorralasen: Magón por el sur y Asdrúbal Giscón por ell oeste.

Desde Cartagena hacia Linares el camino de entrada en la provincia de Jaén sería por la zona noreste, siguiendo aproximadamente, por lo que ahora es la actual carretera N 322: Puente Génave, Arroyo del Ojanco, Villacarrillo.

Asdrúbal se encontraba en el camino de entrada acampando en los alrededores de Baécula, avisado de la llegada de los romanos, busca un lugar estratégico en las cercanías, un cerro donde acampar, por una parte una amplia llanura y por otra con un desnivel protegido por un río. Escipión vio la posición ventajosa de Asdrúbal pero si no atacaba pronto corría el riesgo de ser cercado por los otros ejércitos cartagineses. Al segundo día decidió probar suerte tanteando directamente al enemigo. Tras arengar a sus soldados recordándoles la conquista de  Cartagena dividió su ejército en dos partes: él mandaría un ala  y Lelio, la otra, envolviendo al enemigo sin darle tiempo ni espacio para desplegarse. Escipión aplicó la táctica  que tan buenos resultados le estaba dando a Aníbal frenta a los romanos en la península Itálica, habiendo sufrido el propio Escipión las desastrosas consecuencias, y de la que aprendió la lección.

Asdrúbal seguro de su ventajosa situación, se confió creyendo que era una simple toma de contacto para probar sus fuerzas, y cuando se percató de que era un ataque en toda regla, era demasiado tarde para desplegar sus efectivos ante la acción envolvente de los romanos. Asdrúbal emprendió la huída para salvar el mayor número posible de hombres que llevar para reforzar el ejército de Aníbal, (pero en Italia también fue derrotado por lo que no llegó ni un hombre de refuerzo a Aníbal).

Se supone que habría entre 40.000 y 60.000 hombres entre ambos ejércitos con unos 8.000 muertos y 12.000 heridos, aunque no son muy fiables la cifras indicadas por los historiadores romanos.

Tradicionalmente se ha venido escribiendo que la batalla de Baécula tuvo lugar alrededor de Bailén debido a la similitud de los  nombres y por estar esta próxima a Cástulo, ya que según los escritores antiguos (Tito Livio y Polibio) la batalla tuvo lugar cerca de Cástulo.

El director de CAAI y profesor de la Universidad de Jaén, Arturo Ruíz presentó el resultado de una investigación que el grupo arqueológico llevó a cabo durante dos años siguiendo las descripciones topográficas descritas en los textos de los dos escritores romanos, prospectando 9 lugares estratégicos de la zona del alto Guadalquivir, cerca de los poblados ibéricos que hubiesen dejado de existir en el s. II a.C. ya que de haber perdurado se hubiese conocido su nombre a través de inscripciones. De las nueve prospecciones llevadas a cabo, únicamente en el Cerro de la Albahacas. se encontró en superficie material (puntas de flecha, proyectiles de honda,lingotes de mineral, ect.) para aifrmar que en dicho lugar se desarrolló la batalla. 

Nota publicada en Marzo de 2005.

Antonio Ceacero Hernández.